domingo, 14 de octubre de 2007

Arbolito

Más pedidos, más cumplidos.

El 12 de Octubre es una fecha extraña y que me hace entrar en contradicción permamente. Durante años me sentí engañada, haciéndome creer que Colón nos había descubierto y que llegó a estas tierras pidiendo permiso y estrechando manos, intercambiando cultura y sobre todo respetando. Por suerte y por desgracia me di cuenta que no fue así.

La canción no tiene que ver específicamente con el 12 de octubre pero encuentro miles de puntos de comparación, lamentablemente. Todo tiene que ver con un mismo plan macabro que se renueva según la época... siempre queriendo matar las creencias, los sueños, los ideales y siempre del mismo modo... matándonos (en el sentido literal de la expresión). Expropiándose de
la libertad de ser, de sentir de vivir, de luchar. La emoción me llega de muchos lados... un joven indio que reivindica su pueblo, un pueblo del sur mexicano luchando por la liberación nacional, una nación en una plaza con ollas vacías y, por suerte y por desgracia, hay miles de ejemplos más que demuestran que aún seguimos resistiendo, que seguimos en pie... por el pasado, por el presente... por un futuro libre para todos y todas... porque no debemos pedir permiso para ser libres!

Mil Ocho Veintiseis, 1826, el gobierno Argentino del demócrata Rivadavia (como es designado actualmente) contrata al Coronel prusiano Rauch como dice textualmente el decreto “para eliminar a los ranqueles”. ¿Por qué eliminar a los ranqueles? ¿Qué mal habían hecho los ranqueles? Esos indios hermosos, pobladores de esa inmensa Pampa y va llegar el coronel Rauch y hay que leer sus partes en el archivo de la Nación.. por ejemplo dice : “Hoy 14 de octubre degollamos a veintisiete ranqueles para ahorrar balas”. Fíjense que occidental y cristiano; los ranqueles no tienen salvación porque no tienen sentido de la propiedad. Claro, porque para venir a este mundo hay que tener sentido de la propiedad. El hombre libre no sirve. Y después como si hubiese estado un siglo adelantado dice el coronel en su parte en alemán, escribe: Los ranqueles son anarquistas. ¡Fíjense qué sabiduría! Si son anarquistas la teoría de la libertad hay que eliminarlos. Y entonces va matando a la pampa argentina, va matando a sus habitantes naturales.

Hasta que de pronto surge un indio adolescente, lo llamaban Arbolito... y el observó que el coronel Rauch se adelantaba siempre a la tropa como en esos cuadros antiguos con la espada señalando el horizonte... Y Arbolito lo va a esperar en una hondonada; pasa el coronel europeo, le bolea el caballo con las boleadoras... Cayó el militar europeo, y el indio cometió el sacrilegio de cortarle la cabeza. Así vengaba a tantos de sus compañeros de las pampas. La Ciudad de Buenos Aires recibió con toda pompa el cadáver del militar europeo muerto de esa manera. Señalan los historiadores que fueron las exequias más ricas de todo ese período argentino.

Arbolito se perdió en la inmensidad de las pampas, ya nadie lo recuerda.

La ciudad donde ocurrieron los hechos se llama hoy Coronel Rauch, y muchas calles recuerdan al oficial prusiano, pero ninguna a ese héroe de las pampas… el querido indio Arbolito.

Relato de Osvaldo Bayer

Links para seguir cuestionando y creciendo:
www.chayar.com.ar
www.arbolitofolklore.com.ar

Cintia.



Arbolito- Arbolito

Oye mi niño parece ha cambiado la suerte
son esos hombres de arriba cargados de muerte
traen sus armas que queman la piel si te dan
quieren quedarse las tierras los bosques y el mar.
Cómo explicarte mi niño algo que yo no entiendo
vienen cerrando los campos y poniendo dueños
y en su camino salvaje bañando de sangre
todas las cosas que el sol ilumina en la tarde.
Arbolito...
tu lanza nuestro camino,
Arbolito...
las pampas son tu destino.
El coronel y su tropa avanzan por la tierra
traen de Europa el más nuevo manual de la guerra
indios salvajes que no tienen Dios ni gobierno
van a tener que aprender a morir como perros!
Un joven indio ya harto e tanta prepotencia
tantos hermanos caídos vengarlos quisiera
ansioso espera a la tropa que ahí viene, que ahí llega
volteó al valiente coronel... y le cortó la cabeza!
Arbolito...
tu lanza nuestro camino,
Arbolito...
las pampas son tu destino
Arbolito...
tu lanza nuestro camino
Arbolito...
LA TIERRA NOS NACE EN EL GRITO!

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy lindo lo de Arbolito, me acordé de Memoria de Siglos, de Hermética, sobre el quinto centenario de matanzas.

Con lindo digo lindo el texto y el relato, está bien hecho, a eso voy.

María dijo...

Bellísimo, realmente hermoso, la letra, la música, la armonía del grupo, pero lo que me tocó el alma fué la inspiración de hacer un arreglo y una presentación a un personaje que jamás supo que haría historia. Existió? espero que si, en mi pais Venezuela también hubo muchos "arbolitos", en especial uno Guaicaipuro, ojalá alguien hiciera un arreglo para él.
Felicitaciones

Gabriel dijo...

Traspasar el olvido impune de los que escribieron la historia, rescatar el valor de los anónimos seres borrados de la letra del pasado, ponerlos a consideración y juicio de las generaciones presentes y futuras, es algo que los que lo conocen, no pueden ni deben dejar de hacer.

Gracias Cintia por sacudir nuestro avisperos, vamos a darles roncha a los que estén dormidos en una siesta eterna.